Conoce las propiedades del bone broth y el impacto que tiene sobre tu salud
El bone broth o caldo de huesos es una receta muy común en Estados Unidos cuyo origen se remonta hasta la edad de piedra. Es típico de la dieta paleo elaborada a partir de huesos de animales, que recientemente se ha vuelto tendencia por sus atributos nutricionales. Te contamos un poco más sobre este particular platillo.Beneficios del bone broth
- Facilita la digestión, pues atrae jugos gástricos al estómago, lo que ayuda a descomponer los alimentos. De hecho, este caldo es utilizado para tratar enfermedades digestivas al combatir el desequilibrio de microorganismos.
- Ayuda a reforzar el sistema óseo, reduce el dolor articular gracias a su aporte en calcio, magnesio, glucosamina y condroitina extraídos del cartílago.
- Contribuye a mantener la piel, el cabello y las uñas sanas, pues aporta colágeno, gelatina y prolina, aminoácido que favorece la formación de colágeno.
- Combate la inflamación, gracias a su composición en aminoácidos como la arginina, glicina y prolina.
¿Cómo preparar bone broth?
Anímate a probarlo con esta receta, procurando que todos sus ingredientes sean orgánicos.
- 1 kg de huesos de libre pastoreo orgánicos (puede ser res o pollo). Como tip, te recomendamos que tengan cartílago, como patitas de pollo, huesos con médula y costillas
- 2 l de agua purificada.
- 1/4 de taza de vinagre de manzana
- ½ cebolla
- 3 zanahorias peladas y picadas en trozos grandes
- 3 tallos de apio picados en trozos grandes.
- ½ poro
- 1 bouquet garní (perejil, tomillo y laurel atados con un hilo)
- Sal de mar natural o sal de Himalaya al gusto y cúrcuma
- Coloca los huesos en una olla grande de acero inoxidable con agua fría y vinagre, ayudará a extraerles todos los minerales.
- Agrega todos los vegetales, el bouquet y la sal a la olla.
- Hierve al menos por 12 horas a fuego muy bajo. En caso de que el agua se consuma, agrega más.
- Mientras hierve, limpia constantemente tu caldo quitando los residuos que se forman en la superficie.
- Pasadas por lo menos 12 horas, cuela el caldo con una manta de cielo o bolsa para hacer quesos.
- Guarda el caldo en frascos de vidrio y refrigera o congela una vez que se haya enfriado.