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Ya sea para armar tu cava, una reunión, la comida, la cena o un simple antojo de fin de semana, nunca está de más tener unos exquisitos vinos de mesa para dejar que su sabor y matices se fusionen con tus recetas, haciendo que cada platillo destaque aún más. ¡Encuentra los ideales en Walmart Express!
¿Qué es un vino de mesa?

Se le conoce como vino de mesa a aquel que no está amparado bajo ninguna denominación de origen, es decir, que no pertenece a algún área geográfica en específico, a diferencia del Vino Tinto Monte Xanic Merlot que es de México, de la región Valle de Guadalupe. Mientras que El Vino Tinto Cune rioja reserva, es de España, Rioja y tiene añejamiento de 7 años.
Es por eso que en su etiqueta no se indicará el año de cosecha, la zona vinícola a la que pertenece, variedades de uva y las características organolépticas (color, sabor, olor y textura). Además, es un vino que se produce para ser consumido joven, por lo que su aroma y sabor son más intensos.
¿Cómo elegir un buen vino?

No necesitas ser un experto enólogo para elegir un buen vino de mesa, lo único que debes saber es que cada vino se puede acompañar con un alimento diferente, por ejemplo, los vinos blancos como el Chardonnay y Sauvignon Blanc se maridan con salsas cremosas, mantequilla, alimentos picantes y especiados. Mientras que los vinos tintos como el Merlot y Cabernet Sauvignon van con carnes rojas, aves, pastas y arroces.
No nos olvidemos de los vinos rosados como el Cabernet Sauvignon Rosado y Riunite Lambrusco Rosé, que se llevan perfecto con verduras, carnes frías, pescados y mariscos como filetes de pescado, salmón y sushi, entre otros.
¿Vinos secos o dulces?

Es cuestión de gustos elegir entre un vino seco o uno dulce, pero si quieres aprender a diferenciarlos con tu paladar te recomendamos centrarte en tres factores, ¡toma nota!
- Aroma: Los vinos dulces suelen presentar aromas dulces, afrutados o florales, mientras que los secos tiene matices herbáceos, especiados y amaderados.
- Consistencia: Cuando la consistencia es más espesa, se trata de un vino dulce, esto debido a la cantidad de azúcar que posee, mientras que los vinos secos tienen una concentración de azúcar un poco más baja, lo que provoca que se convierta en alcohol durante el proceso de fermentación, dándole una acidez más elevada.
- Sabor: Tu paladar será tu aliado infalible para este paso. Comienza por darle un trago al vino y deja que repose en tu boca y después al pasarlo empieza a sentir sus matices, si su aroma y sabor persisten en tu paladar se trata de un vino dulce, ya que el vino seco se caracteriza por tener matices muy fugaces, lo que significa que no se perciben por mucho tiempo.
Ahora que ya lo sabes, es momento de elegir el vino de mesa que más te guste.